El pectoral menor es un músculo que puede desarrollar diversa patología muy incómoda para la vida diaria y práctica deportiva
Anatomía del pectoral menor:
Dependiendo de si se considera un músculo la región del hombro o de la región del tórax el origen será uno y la inserción el contrario.
Como músculo del hombro, se originará en el tronco y se insertará en la escápula.
Si se considera músculo del tronco se origina en la escápula y se insertará en las costillas.
Vamos a ponerlo como músculo del hombro.
Se origina en la cara anterior y superior de la tercera, cuarta y quinta costilla, puede haber variaciones y existir origen en más vértebras.
Su inserción es en la apófisis coracoides, en el borde más medial o interno y separado de los orígenes del músculo coracoides y porción corta del bíceps braquial.
Está inervado por el nervio pectoral medial.
Función:
Con el tronco fijo, sobre la escápula realiza el movimiento de rotación anterior, levantando el borde posterior, también desciende la escápula y por lo tanto el muñón del hombro.
Sobre el húmero, pese a no tener inserción, a través de la escápula lo arrastra hacia delante, dando como resultado la postura de hombros adelantados.
Con las escápulas como punto fijo es inspirador y ayuda a levantar las costillas en la fase de inspiración.
Patología del pectoral menor:
Su acortamiento es responsable de la postura de hombros redondeados, suele acompañarse de debilidad de sus antagonistas en los movimientos de la escápula, como romboides y trapecio medio e inferior.
Este acortamiento se puede medir con el paciente en decúbito supino y viendo la distancia que hay entre el borde posterior y externo del acromion y la camilla.
Otra de las patologías más frecuentes del pectoral menor es la aparición del Síndrome del desfiladero torácico justo a su paso por debajo del pectoral menor y apófisis coracoides.
Pese a que es la zona menos frecuente de comprensión, siendo más frecuentes el triángulo escaleno y el espacio costoclavicular, el pectoral menor es la tercera zona de comprensión.
También podemos conocer a esta zona de comprensión como túnel subcoracoideo.
En el síndrome del desfiladero torácico se produce un atrapamiento del paquete vasculonervioso, plexo braquial, arteria y vena subclavia.
Pueden aparecer síntomas neurológicos, arteriales o venosos, una mezcla de los mismos o todos a la vez.
En presencia de este síndrome es fácil encontrar dolor a la palpación del pectoral menor en especial en la coracoides.
Finalmente, los puntos gatillo del pectoral menor dan dolor muy intenso al hombro y un poco menos intenso al pectoral y la cara medial del brazo alcanzado los dedos 3, 4 y 5.
Tratamiento del pectoral menor:
Tradicionalmente se incluyen ejercicios de estiramiento. En este caso el más común es estirar el pectoral menor.
Se estira con el brazo a 90º de abducción para llevar la escápula a rotación posterior y desde ahí llevar el brazo hacia detrás o el tórax hacia delante con el objetivo de estirarlo.
En caso de falta de movilidad de la escapula, se pueden contraer los trapecios medio, inferior y romboides y desde ahí se podrá notar estiramiento del pectoral menor.
Los ejercicios de fortalecimiento del pectoral menor van desde la inspiración con retracción de escápulas, para fijar un extremo y trabajar el otro. Se hará una inspiración excéntrica volviendo lentamente a la posición inicial.
El resto de ejercicios son todos aquellos que produzcan extensión de hombro, ya que, si no existe buena retracción de escápulas, las escápulas rotarán hacia anterior y los hombros se irán hacia delante.
Para terminar los ejercicios de pectoral mayor, en especial los que trabajan la protracción de hombro, el final de los preses y los de serrato anterior estimularán el músculo.
Normalmente este músculo suele estar acortado y más que trabajarlo en acortamiento, hace falta estirarlo y trabajarlo en excéntrico.
Fisioterapia para el pectoral menor:
Se utilizan las distintas técnicas para trabajar la musculatura, masaje y puntos gatillo, ambos bastante dolorosos.