Se describe como síndrome femoropatelar o síndrome anterior de la rodilla, al dolor que se produce alrededor y por detrás de la rótula.

Anatomía de la rodilla:
En la rodilla podemos distinguir dos articulaciones.
La articulación femorotibial, formada por los cóndilos femorales y los platillos tibiales, además presenta los meniscos interno y externo para aumentarlas superficies articulares.
La articulación femoropateral o femororrotuliana que está formada por la rótula o patela y la tróclea femoral. En esta articulación la rótula se desplaza a lo largo del surco troclear. Como una polea.
Función de la rodilla:
La rodilla es una articulación que permite el movimiento de flexión y extensión, este movimiento corre a cargo de los gemelos, isquiotibiales y cuádriceps respectivamente.
Causas del síndrome femoropatelar:
Mala alineación o del eje cadera rodilla y tobillo, debido a un valgo de rodillas, estructural o funcional, un exceso de ángulo Q.
Mal formación congénita en el surco troclear, en la cara posterior de la rótula o ambas, de esta manera las superficies articulares no son totalmente congruentes y aparecen zonas en las que hay un aumento de presión y pueden ser patológicas.
Debilidad de la musculatura extensora de la rodilla, en especial el vasto medial del cuádriceps.
Acortamiento del tensor de la fascia lata y los isquiotibiales.
Pie pronado, ya que puede predisponer al valgo de rodilla.
Traumas directos o indirectos, como golpes o gestos repetidos. Por eso el dolor puede aparecer de manera espontánea y el paciente no recuerda haber hecho nada para tener dolor de rodilla.
Síntomas del síndrome femoropatelar:
Dolor en la cara anterior de la rodilla, de intensidad alta, pero a veces difuso que dificulta el diagnóstico.
Puede ir acompañado de derrame articular e inflamación que cursa con aumento de temperatura en la rodilla, como caliente.
Debilidad del vasto medial que se evidencia en una falta de fuerza o incapacidad para la extensión completa de la rodilla (en el caso de aplicar corriente con EMS, la corriente no es capaz de producir una contracción mantenida del músculo y tiembla).
Incapacidad para bajar y/o subir escaleras y a veces cuestas y en ocasiones extender la rodilla del todo (y de ahí la atrofia y retracción muscular).
Tratamiento del síndrome femoropatelar:
El objetivo es identificar las causas que lo producen, de esta manera se mandarán ejercicios específicos.
Además, se deben aplicar medidas antiinflamatorias como hielo, ultrasonidos y corrientes analgésicas, mientras que no haya contraindicación.
Se pueden aplicar vendajes de kinesiotape con el objetivo de mejorar la propiocepción de la rodilla y recuperar el vasto medial del cuádriceps.
Ejercicios para el síndrome femoropatelar:
Importante fortalecer el vasto medial, para sujetar la rodilla, los abductores y rotadores externos de cadera para prevenir el valgo de rodilla, fortalecer los extensores de cadera y flexores plantares con el objetivo de repartir el trabajo en la cadena extensora del miembro inferior.
Finalmente se recomienda el estiramiento de toda la musculatura, pero también se puede trabajar la musculatura acortada en excéntrico con el objetivo de que no esté tan tensa. Completaremos 3 series de 15 repeticiones sin notar dolor en cada uno de los ejercicios.
Extensión de cuádriceps, últimos grados:
Al igual que en la condromalacia rotuliana, sentados, con la pierna apoyada y la pantorrilla colgando, levantamos la pierna lentamente, hasta llegar a la horizontal, bajamos solo los últimos grados de 0º a 15º o 30º, sin que aparezca dolor y volvemos a subir lentamente.
Abducción de cadera:
De pie, levantamos la pierna lateralmente, aguantamos un segundo y bajamos lentamente en otros 3 segundos, si podemos no apoyar la pierna en el suelo, mejor.
Rotación externa de cadera:
Tumbado en decúbito lateral, con un banda elástica entre las piernas, por debajo de las rodillas y las piernas dobladas, abrimos la pierna de arriba y aguantamos abierto un segundo, volvemos a bajar en otros 3.
Elevación de talón:
Podéis hacerlo con una banda entre las piernas o una pelota entre los tobillos, para trabajar el tibial posterior, los que presentéis pie pronado. También se puede hacer sin nada o a pata coja para fortalecer los flexores plantares de tobillo y quitar trabajo al cuadriceps. Levantar el talón lentamente y bajar lento, si podéis en escalón mejor. Cuidado si tenéis patología del tendón de Aquiles.
Extensión de cadera:
Tanto el peso muerto como los ejercicios que no impliquen extensión de rodilla excéntrica, están recomendados para fortalecer el glúteo mayor y quitar trabajo al cuadriceps.
Flexión de rodilla:
Con el objetivo de elongarlos, es mejor favorecer la fase excéntrica, el mejor ejercicio para ello, sería el curl sobre fitball, ya que además trabaja la extensión de cadera.