Ejercicio de flexión de hombro en isometría, sin movimiento, para la rehabilitación de lesiones de hombro en fisioterapia deportiva.
En anteriores post hablamos del movimiento de la articulación escapulotorácica, una vez recuperado el movimiento en la articulación escapulotorácica es hora de recuperarlo en la articulación glenohumeral y trabajar la flexión.

Anatomía y biomecánica:
Recordando la anatomía rápidamente la articulación glenohumeral es la más móvil del cuerpo humano y por ende una de las más inestables.
En el caso del movimiento de flexión que consiste en levantar hacia delante, se distinguen tres fases diferenciadas, en las cuales interviene una articulación distinta.
Fases de la flexión de hombro:
En la primera fase de la flexión, el movimiento se produce en la articulación glenohumeral, tiene un recorrido de 60º.
Los músculos motores son el deltoides anterior, coracobraquial y pectoral menor y en algunos casos se describe la porción larga del bíceps y la porción clavicular del pectoral o superior también como músculos motores.
La segunda fase del movimiento de la flexión, va de los 60º a 120ª, a partir de los 60º la cabeza del húmero choca contra la glenoides de la escapula poniendo en compromiso el tendón del supraespinoso.
En condiciones normales este movimiento no produce dolor pero en presencia de inflamación del tendón del supraespinoso o patología del manguito rotador el movimiento se hace imposible. Los músculos motores siguen siendo los anteriores y se añaden el trapecio superior o haz clavicular y el serrato anterior.
La tercera fase de la flexión, va desde los 120º hasta los 180º en esta fase es necesario de la participación del raquis contralateral en el caso de un hombro, en el caso de los dos se produce un aumento de la lordosis lumbar.
Ejercicio isométrico de flexión a 0º, 15º, 30º, 45º y 60º:
En caso de lesión de hombro, lo mejor será consultar a un profesional previamente para que diagnostique correctamente la lesión y evitar correr riesgos
En cualquier rehabilitación de hombro, una vez controlado el proceso inflamatorio es muy importante hacer el ejercicio de flexión de hombro.
Pegados a una pared de cara, mirando hacia ella, sin mover el brazo, vamos a empujar la pared como si quisiéramos levantar el brazo pero sin levantarlo, ya que la pared, nos va a limitar. Ese sería un ejercicio isométrico de flexión a 0º.
Podemos alejarnos de la pared, trabajando a 15º, 30º 45º y 60º que es justo hasta en la angulación en la que choca la cabeza humeral con la escápula. Haremos de 3 a 6 series de 10 a 45 segundos por serie y descansando el mismo tiempo que de contracción.
Ejercicio isométrico de flexión entre 60º y 80º:
Elevaremos el brazo frontalmente entre 60º y 80º buscando la máxima amplitud pero sin dolor. En caso de lesión incluso por debajo de 60ª nos quedaremos. Una vez encontremos el ángulo que no duela (puede no doler en ningún recorrido) aguantaremos 45 segundos en esa posición.
Tenemos que evitar arquear la espalda lo que revelaría una insuficiencia de la musculatura responsable de la flexión de hombro, además de poner en peligro la estabilidad de nuestra espalda.
También podemos notar alguna molestia en antebrazo o muñeca, puede ser por insuficiencia de la musculatura del antebrazo, en tal caso tenemos que adaptar el ejercicio a nuestro antebrazo.
Haremos entre 5 y 6 series de 45 segundos cada una con 2 minutos de descanso entre series. Si no llegamos a 45 podemos empezar por menos tiempo de contracción, si notamos algún dolor interrumpimos el ejercicio.
Fisioterapia para la flexión de hombro:
En caso de dolor, el fisioterapeuta podrá buscar la causa y tratarla, si existe inhibición o descompensación de la musculatura, mediante masajes y estiramientos, corrientes de electroterapia y kinesiotape se podrá reequilibrar.